RELOJES: BREGUET MARINE ÉQUATION MARCHANTE 5887
Breguet no dejó de demostrar durante toda su carrera su excepcional pericia para medir el tiempo. Su entrega y sus revolucionarias contribuciones le hicieron merecedor de reconocimiento y honores. Gozó de buena reputación en toda Europa y encontró en Luis XVIII, rey de Francia, un ferviente admirador. En 1814 le nombró miembro del Comité de Longitud de París. Este organismo, creado por la Convención Nacional en 1795, nació con la vocación de perfeccionar las diversas ramas de la astronomía así como sus aplicaciones en la geografía, la navegación y la física del globo. Entre sus méritos destaca la publicación anual de documentos de referencia, como las efemérides astronómicas.
Esta prestigiosa institución se compone de unos veinte miembros entre los cuales figuran topógrafos, astrónomos, navegantes y demás artífices de campos relacionados. Siendo el único representante de su profesión, tan útil para físicos y navegantes, Breguet se convirtió en el relojero de referencia, especialmente para el cálculo de las longitudes en el mar.
Aparte de esta distinción, en virtud de la ordenanza de 27 de octubre de 1815, Luis XVIII concedió a A.-LBreguet el título oficial de Relojero de la Marina Real, el título más prestigioso al que un relojero podía aspirar dadas las implicaciones científicas que entraña el concepto de relojería de marina. Con dicho título también ejercía una función primordial para el país. En aquella época, los cronómetros de marina eran de importancia capital para las flotas, ya que les permitía calcular la posición de los navíos.Siguiendo la estela de este legado único, la Casa Breguet lanza hoy en exclusiva el modelo Marine Équation Marchante 5887. Esta Gran Complicación marca el inicio de una nueva era en la línea contemporánea Marine.
La ecuación del tiempo es una de las complicaciones relojeras másinusuales y fascinantes. Permite indicar la diferencia entre el tiempo
solar medio (horas y minutos civiles) y el tiempo solar verdadero (horas y minutos solares). Desde la Antigüedad, el sol ha constituido la base para medir el tiempo. Sin embargo, el movimiento aparente del sol (el verdadero tiempo solar que se medía con los relojes de sol) no es regular. Con la mejora de la precisión relojera, los relojes se convirtieron en la base del tiempo y el tiempo solar verdadero fue remplazado por el tiempo solar medio, en el que todos los días tienen la misma duración de 24 horas. El tiempo solar medio puede variar con respecto al tiempo solar verdadero, y dicha variación oscila entre menos de 16 minutos y más de 14 minutos. Solo durante cuatro días al año, ambos tiempos son equivalentes. Las diferentes posiciones del sol en el cielo se reproducen de manera idéntica en las mismas fechas, y los relojeros pueden «programarlas» con la ayuda de una leva especial. Con su forma en 8, esta leva permite reproducir mecánicamente el analema, la curva que traza el sol en el cielo. Su ejecución ha de ser extremadamente precisa. La leva se acopla a un sensor que desplaza una palanca de ecuación y que permite señalar la diferencia entre la hora civil y la hora solar (que puede oscilar entre
menos de 16 minutos y más de 14 minutos). Esta indicación se suele disponer en una sección o esfera suplementaria. Así pues, para conocer la hora solar verdadera, le corresponde al usuario hacer el cálculo mentalmente, bien sumando o bien restando a la hora media la diferencia señalada
El nuevo Marine Équation Marchante de Breguet mejora esta lectura ya que indica simultáneamente la hora civil y la hora verdadera con la ayuda de dos minuteros diferentes. La aguja solar activa, decorada con un sol dorado facetado, muestra la lectura directa de los minutos del tiempo solar: un mecanismo cómodo y que permite ganar tiempo. Esta «simple» indicación requiere de una elaboración compleja que muy pocos relojeros son Baselworld 2017 capaces de acometer. Efectivamente, la aguja de los minutos solares debe cumplir dos condiciones: debe avanzar sobre la esfera al igual que lo hace la aguja convencional de minutos civiles y, al mismo tiempo, debe diferir cada día con respecto a ésta conforme al analema, con el fin de poder indicar la ecuación del tiempo.
Breguet ha logrado obtener este resultado dotando a su aguja solar activa de un engranaje diferencial que se acciona mediante dos fuentes de rotación completamente independientes entre sí; la rotación de los minutos civiles y la que se activa mediante una palanca conectada a la leva de la ecuación, la cual completa una vuelta a lo largo de un año. Breguet ha desarrollado una leva de ecuación extremadamente refinada que se sostiene mediante un disco de zafiro transparente que, a su vez, permite corregir la ecuación del tiempo al mes.
Naturalmente, a la complejidad que supone la lectura de la ecuación activa se añade a esta Gran Complicación un calendario perpetuo. Dos ventanillas, una situada entre las 10 h y las 11 h y la otra entre la 1 h y las 2 h, muestran respectivamente los días de la semana, así como los meses y el año bisiesto. El calendario se sitúa dentro del disco horario y se puede leer con la ayuda de una aguja retrógrada acabada en áncora y que recorre un arco de 9 h a 3 h. La distribución del conjunto de lecturas sobre la esfera ha sido cuidadosamente diseñada para que éstas sean simples e intuitivas a la vez que se preserva una estética inmejorable.
Equipado con el calibre automático 581DR, el nuevo Marine Équation Marchante de Breguet alberga una tercera complicación, y no precisamente de las más pequeñas: está dotado de un tourbillon de M60 segundos cuya caja de titanio contiene un volante Breguet con espiral de silicio. Este atributo innovador permite al volante alcanzar una frecuencia de 4 Hz a la vez que conserva una reserva de marcha particularmente cómoda en una pieza automática. Visible mediante una ventanilla situada entre las 7 h y las 9 h, dispone de una autonomía de 80 horas.