El origen de Semon hay que situarlo en una charcutería llamada La Selecta. De aquel local, fundado por su abuelo, salió María Vidal en 1962, cuando decidió abandonar el negocio familiar y establecerse por su cuenta. Abrió un pequeña tienda en la parte alta de Barcelona, con la idea de ofrecer productos gourmet a un público selecto. Y poco a poco, convirtió lo que al principio fue un pequeño colmado, en una institución.
En 2015, los hermanos Paulino y Pedro Robles adquieren la propiedad de Semon. Los dos conocen muy bien la casa. Paulino, que considera a María Vidal una segunda madre, entró a trabajar en Semon a los 17 años y permaneció allí durante 45 años, como máximo responsable del negocio. Su hermano Pedro se incorporó más tarde, con 15 años era aprendiz y diez años después fue el encargado de la apertura de Semon en Madrid para volver de nuevo a Barcelona y trabajar en el local 10 años más, hasta crear su propio negocio, La Despensa de Laforja.